La pasta es un platillo que nos presenta una cantidad de opciones casi infinitas, y su consumo es tan común en el mundo que a lo largo del tiempo se han creado costumbres que no siempre son las adecuadas. He aquí una lista de errores que cometemos y sus soluciones para que nuestro plato tenga el verdadero sabor de Italia.
Error 1: Echo la pasta sin esperar a que el agua hierva
Es como querer freir papas fritas con aceite frío. Hay que echar la pasta cuando el agua hierva para que se pueda despegar bien y que, por fuera, al igual que ocurre con las papas, se mantenga la parte crujiente, y, por dentro, se cocine el centro.
Error 2: Primero echo la sal y luego la pasta
La sal siempre se agrega una vez que la pasta se ha introducido en la olla con el agua hirviendo, porque si echamos la sal antes, esta alenta el punto de ebullición, la cantidad más o menos es de 15 gr. (una cucharada sopera) por litro de agua. No te preocupes, la mayoría de la sal se quedará en el agua.
Error 3: Lanzo la pasta a la pared para saber si está en su punto
Si se pega, entonces está en su punto. Es, sin duda, una leyenda urbana. La leyenda no nos decía si estaba justo en su punto, algo más cocida. Antes que ensuciar las paredes, mejor romper la pasta y ver si tiene un puntito blanco en el centro.
Error 4: Siempre dejo un rato la pasta en el colador
El error más común es no fijarse en el tiempo de cocción que se indica en el envoltura. En Italia terminan el plato en la sartén, si vas a saltear la pasta, es mejor escurrirla un minuto antes. Si la cueces durante el tiempo que marca el paquete y luego echas la salsa, se cuece demasiado. un consejo: la salsa siempre espera a la pasta. Así que ni se te ocurra prepararla después de haber hervido la pasta.
Error 5: ¿Qué es ‘al dente’?
Esta expresión italiana significa “al diente” y designa el grado justo de cocción de la pasta: debe retirarse del fuego y escurrirse cuando todavía está firme al morderla. Recuerda que la pasta al dente tiene, entre otras cosas, un menor índice glucémico (engorda menos).
Error 6: Le echo un chorro de agua fría para detener la cocción
Está muy extendida la idea de que echar agua fría a la pasta, una vez cocida, es la mejor forma de que no se siga cociendo más. No es nada recomendable a echar agua fría encima. Afecta la textura y el sabor de la pasta.
Error 7: Tiro el agua donde la cocí
¡Ojo! Echar un poco de esa agua cuando la cocinemos con la salsa le dará un mejor sabor.
Error 8: Echo un chorrito de aceite en el agua
Uno de los errores habituales es echar unas gotas de aceite con el agua para cocer la pasta. Esto no es necesario, pues hace que la pasta se ponga escurridiza y no aporta nada. Puede tener sentido incorporarlo –aunque no necesariamente– después de hacer la pasta, cuando la sacas del colador y para que no se pegue, si es que tienes que esperar un par de minutos para saltearla.